Durante mis años de trabajo como asesora fiscal, he escuchado en reiteradas ocasiones algunas personas quejarse por situaciones incómodas en las que los impuestos son protagonistas. La mayoría de
las veces el problema se origina por una gestión inadecuada de los impuestos y por desconocimiento del tema. Pues bien, aqui les dejo algunos consejos para que puedan gestionar sus impuestos y hacer que
jueguen a su favor:
- Interésate:
Ya sea que trabajes como profesional liberal, profesional independiente o tengas un negocio propio, tendrás que pagar impuestos, por lo que la primera recomendación sería que te intereses en conocer cuáles impuestos debes pagar, como pagarlos y en cuales plazos. Estas informaciones que necesitaste las puede proveer la propia Dirección General de Impuestos Internos (DGII) ya sea a través de un oficial o a través de su página Web en donde puedes encontrar material muy detallado sobre los impuestos y trámites tributarios. Esto nos lleva a la siguiente recomendación.
- Estar al día en el cumplimiento de las obligaciones fiscales.
Una vez conozcas tus obligaciones fiscales, ten presente siempre las fechas de presentación de las declaraciones y pagos de los impuestos. Un día que te retrases te aumenta 11.1% del impuesto adeudado. Además, cuando dejas de presentar alguna declaración, en el sistema de la DGII apareces como “omiso”, lo que quiere decir que estas atrasado en el cumplimiento de tus obligaciones y como consecuencia, la DGII puede poner su interés en ti y reclamar que presentes la declaración y realices el pago de impuestos más las respectivas penalidades.
- Ten coherencia en las informaciones que reportas.
Por ejemplo, cuando eres profesional liberal o profesional independiente y eres contratado por compañías, éstas tienen la obligación de retener tus impuestos y pagarlos en nombre tuyo a la DGII. Cuando lo hacen deber reportar en detalle el monto de honorarios que te pagaron, las retenciones aplicadas tanto del Impuesto Sobre la Renta (que es un crédito fiscal para ti), como del Impuesto Sobre la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios. Con esta información la DGII ya tiene identificado parte de tus ingresos y puede reclamarte la porción del impuesto pendiente de pagar.
- Mantener un registro ordenado de las operaciones realizadas, especialmente operaciones de
venta, costos y gastos.
Aunque no cuentes con contabilidad organizada, ten registros de cuales son tus ingresos, tus costos y gastos relacionados a la actividad de negocio que te hace ganar dinero. En el caso de los costos y gastos, asegúrate de que sean comprobantes válidos, es decir, que tengan Número de Comprobante Fiscal y sea válido para crédito fiscal.
- Solicitar siempre las cartas de retención cuando aplique
Siempre que por la prestación de un servicio te hagan retenciones de impuestos, pídele a tu cliente que te de una carta que certifique la retención aplicada. Cuando son retenciones del Impuesto Sobre la Renta, éstas actúan como créditos fiscales que te ayudan a reducir el impuesto que tienes que pagar al final del año cuando presentes tu declaración jurada. Una carta que dejas de recibir es dinero que pierdes.
- Busca ayuda de un experto
Es probable que no tengas tiempo de atender correctamente estos temas, es ese caso te recomiendo buscar la ayuda de un asesor experto en impuestos, pero asegúrate de tener referencias porque sus errores te cuentan dinero a ti.
Finalmente, aun cuando tomes estas precauciones, es probable que un día te toque la lotería de una fiscalización. En ese caso, te será muy útil haber prestado atención a estos consejos ya que, lo que pudo haber sido un dolor de cabeza, puede convertirse en un simple intercambio de informaciones con la DGII.