El covid-19 ha venido a sacarnos de nuestra zona de confort y a ponernos creativos. Algo que nunca habíamos vivido, al menos que yo recuerde, es la paralización de los negocios a nivel nacional. Ahora el reto es esperar que pase la tormenta y mientras eso sucede, idear soluciones creativas que nos permitan poner en marcha nuestros negocios y “normalizar” el mercado lo más pronto posible.
Ahora toca cubrir compromisos fijos sin tener una entrada de dinero regular y es ahí donde hay que poner la teoría en práctica. Quienes tuvieron la visión de guardar dos o tres meses de gastos fijos para casos de emergencia serán ahora los que puedan salir adelante con sus negocios y gastos personales con menores contratiempos. Sin embargo, aquellos que viven el día a día, gastando cada peso que recibe, tendrán que buscar en este momento otras fuentes de ingresos y aun estando en la tormenta, administrarse, porque realmente no sabemos cuanto va a durar los efectos económicos de esta situación.
En este país, el nivel de contagio del covid-19 es 1.5 veces con relación a España e Italia. Es un caso serio al que aparentemente aun algunos lo toman en broma. Cuando todos seamos conscientes y hagamos lo debido para detener la epidemia, entonces estaremos cooperando para que este problema dure lo menos posible.
Por ahora como dueños de negocios debemos prepararnos para tiempos duros, porque los verdaderos efectos de esto no serán algo de 15 días. Nos toca revisar gastos y recortar aquellos que sean menos necesarios, buscar la forma de ser mas eficientes financieramente. Nos toca ponernos creativos y brindar nuestros servicios “online”, a domicilio, o por citas para limitar el flujo de personas, tal como es el caso de aquellos negocios que necesitan estar presentes físicamente para prestar sus servicios, por ejemplo, los salones de belleza.
No es una situación fácil, y toca ser empáticos, y aprovechar este tiempo para documentarnos.
El tema del pago de impuestos atormenta a muchos, a pesar de las medidas recientes de prorrogas y facilidades de pago que anunció la Dirección General de Impuestos Internos. Ahora es el momento de aprovechar y conocer la ley, especialmente los beneficios que podemos obtener como contribuyentes. Por ejemplo, la disminución o eliminación del pago de anticipos es posible bajo circunstancias particulares.
La Ley 46-20 está vigente y da facilidades de pago para viejas deudas de impuestos. El artículo 252 del Código Tributario Dominicano otorga descuentos por pronto pago en los recargos por mora.
Toca ser creativos, aprovechar el tiempo y ser pacientes. Todo pasa. Esto también pasará.